Pausa para el té

Un té en medio de la rutina: reconecta con tu ser

Frenar. Desconectar. Respirar. Son palabras que en medio de la rutina y el estrés cotidiano suenan como un gran alivio. Y si es frente a una taza de té, ese momento de pausa se vuelve refugio, abrazo, un encuentro contigo o tu persona favorita. 

Tomar un té para despejarte de una pesada jornada laboral, de horas de estudio o tensión es un regalo que te haces a ti mismo. Es un camino para observar, afinar nuestros sentidos y hallar calma entre tanta vorágine  para reconectar con nuestro ser.

Los países nórdicos, a la cabeza del termómetro de la felicidad, ya habían revelado su secreto: gozar las pequeñas alegrías de la vida.

En Dinamarca, la filosofía “Hygge” implica deleitarse con simples placeres, como comer galletas caseras, ver televisión bajo un cálido edredón, sentarse junto a una chimenea con una taza de chocolate y, por supuesto, saborear un té con un amigo.

El poder de la pausa del té

La pausa del té es más que beber una taza caliente; es liberarse del estrés y renovar mente y cuerpo. Conoce algunas razones para realizarla y alcanzar un estado de bienestar: 

Darte un respiro: El té te ayuda a cortar con las preocupaciones, con lo que te agota en medio del ajetreo diario. 

Desconectar y reflexionar: Es un breve escape que te brinda claridad para hallar soluciones u obtener calma. 

Charlar con los amigos: Compartir una taza de té fomenta encuentros significativos, creando un espacio propicio para la conversación y la amistad.

Darle placer a tus sentidos: Los olores, sabores y texturas del té ofrecen una experiencia sensorial completa, una forma simple y efectiva de distraerte. 

Momentos perfectos para desconectar

Identificar los momentos ideales para disfrutar de la pausa del té es muy importante. Aquí te sugerimos algunos:

Mañana: Inicia con un té verde o negro para establecer un tono positivo y obtener un impulso de energía suave.

Después del almuerzo: Combate la somnolencia post-almuerzo con un té herbal. Facilita la digestión. 

Atardecer: Aprovecha el final del día con un té de manzanilla o lavanda para relajarte. 

Pausa laboral: Si trabajas frente a la pantalla, toma una breve pausa del té para reposar la vista y rejuvenecer la mente.

Antes de dormir: Opta por un té relajante para ayudarte a descansar. 

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